(libre)
había oido de este lugar, al parecer muy apreciado por otras criaturas oscuras y decidí adentrarme para conocerlo, si bien para mi gusto le faltaba mas temperatura,los espacios y las decoraciones eran apropiadas, pase mi mano sobre la pared para sentir sus texturas y entender su historia, la estructura podía decir mucho de ella con solo tocarla, olerla y verla. Había muchos pasillos a lo largo y ancho del piso en el que me encontraba que calulaba era de los superiores, encontré unas escaleras y no dude un instante en recorrerlas hacia arriba, llegué a lo que me pareció el último piso y encontré la salida hacia la azotea del edificio.
Intrigado abrí la puerta para encontrarme con la decepcionante verdad de que no había nadie ahi para empujar, chasquee la lengua unos instantes y me aventuré a dar unos pasos hacia la orilla del edificio, ví hacia abajo como todas las personas pasaban con prisa a pie cerca de la base del edificio, voltee la mirada hacia el horizonte, se podía apreciar toda la ciudad desde ese punto, el viento pasaba furioso cerca de mí, como intentando tirarme, cosa que si llegara a pasar haría solo que me molestara con quien lo hubiera hecho, cerré los ojos y sonreí al recordar la última vez que había estado furioso, fue un pueblo entero el que cayó ese día, el deleite de ver a los valientes humanos intentar enfrentarme logró que una pequeña risa saliera de mis labios, abrí los ojos otra vez y conservé el porte sereno, me invcline sobre una rodilla y me limité a ver el tiempo pasar bajo de mí.