Un cafecito..

*Ya había llegado a ser jefe de los aurores, por fin, y ahora tenía a todo el ejercito de aurores bajo mi mando, también eso era un peligro, pues sabiendo la gente que yo era el jefe podrían intentar ir contra mí, atacarme, con el fin de acabar con todos los aurores. Eso me preocupaba, aunque siempre iba bien defendido con 3 ó 4 personas viajando a mi lado, como mis escoltas privados. Con el tiempo había ido creciendo mentalmente, ahora ya el miedo no era parte de mí, estaba atento a todo y siempre que alguien se había acercado a mí para intentar atacarme había acabado con una clara derrota por su parte. Decía la gente que cada vez me parecía más a mi padre, yo, como no llegué a conocerle, no sabía si eso era verdad o no.

Entré en el starbucks, zona muggle, seguido de mi gran séquito. Me senté en una de las sillas y mandé a mi escolta favorito a que fuese a por un café para mí. Mientras esperaba alguien entró en el local, también rodeado de mucha gente. Miré con expectación a la entrada, pues esa persona estaba escondida entre todo ese tumulto de gente*

Los tiempos eram mas tranaquilos, de eso no habia duda, peor por ello no tendria que confiarme, aun me dirigia a todos lados con la compañía de las doncellas.

Esa tarde ibamos de compras vestidas con la normalidad londicnences una blusa roja y una hermosa falda negra que marcaba mi figura, unos grandes anteojos oscuros, y un bolso que hacia juego con mis zapatillas Chanel de color negro. Dos de mis chicas iban frendte a mi y otras dos a las espaldas, siguiendonos muy de cerca un trio de guardias..

Por qué estabamos ahí? sensillo, por que yo queria un te Chai, mi bebida favorita a la que nunca me podria negar, senreí a Margarett mientras Anne se adelantaba a pedir mi bebida junto con otra chica para que fuera para todas.

Estaba por tomar aciento en medio del local, cuando mi vista se desvia, el lugar estaba abarrotado pero de entre todas esas caras, la de mi hermano resaltó al instante.

-Martgarett yo me sentaré con él mejor ustedes estén al pendiente- Le dije a la mas importante de mis doncellas y me dirigí de inmediato a Andrew

-Hola, hermanito- Saludé con una gran sonrisa,- Puedo sentarme?-...

*Era mi hermana! En cuanto pude verla la sonreí y después ya la vi acercarse hasta donde estabamos nosotros. Mandé con un gesto de cabeza a los escoltas que se levantasen y se separasen por el local, pero estos se fueron a hablar con las doncellas de Chloe, era lógico... son hombres...*

-Sí, por supuesto, siéntate!-dije señalando la silla frente a mí-Qué tal estás?

Me senté con delicadesa dejando mis manos sobre la mesa.

-Todo va de lo mejor me aprece, hace años que no podia salir a estos lugares así fuera con el ejercito completo- reí quedamente

-Cómo estás tú?- Pregunté tomando su mano, hacia tiempo que no tenia trato directo con él, siempre estaba muy ocupado en varias actividades más.

Se acercó Anne y me dio mi tan esperado Chai *_*, dios esas especies lñelagn a ser como una droga, sin duda.

*Vi que llegaba su bebida*

-Sigues bebiendo de eso?-reí-Yo estoy bien, bueno, ya sabes.. Ahora que soy jefe de aurores ando algo liado y... supongo que ahora entiendo más tu posición...-sonreí mirándola a los ojos-es duro esto de estar amenazado... Y lo peor es que te acabas acostumbrando... Y bueno... Como llevas eso de los amores?-dije cambiando drásticamente de tema

Aséntí con la cabeza meintras vevia mi delicioso Chai escuchando a Andrew

-Sí es algo a lo que te acostumbras, andar siempre escoltado y esas cosas pero llegara el tiempoo en el que nada de esto sea necesario, por lo menos eso espero-

Sonreí ante la última preguntam no solía hablar mucho de eso, siempre fui muy prudente en tal tema.

-Maravilloso, son duda alguna, soy muy feliz al lado de Lyonel es como si cada dia lo amara más- Respondí un tanto sonrojada.

-Y tú como vas con eso, cuando sentarás cabeza?-

*Suspiré y negué con la cabeza mientras llegaba mi copa y miraba a esta, bebí un trago y tras un rato ya hablé*

-Pues no lo sé, todavía no he encontrado a ninguna mujer con la que compartir mi vida, no lo sé... Parece que a éstas no les gustan los hombres peligrosos...-reí ya mirando a Chloe-Cómo era mi padre?-nunca la había preguntado sobre él, pero últimamente me había hecho muchas preguntas y ahora tenía el momento de preguntarle sobre ello

-Ya llegará la idicada que no le importará todos los peligors que se puedan correr- Dije cellando mi afirmación con una dulcisima sonrisa.

-Leo, el era una persona increible, tan seguro de su ideología, poderoso lo quiero mucho aún, y me duele que haya perecido por culpa de....- Guardé silencio sintiendo un nudo en la garganta - Fue un gran hombre en verdad

*Quedé en silencio un rato mientras pensba en lo que decía. Mirándola fijamente.*

-Y cuál era su ideología? Si era tan poderoso, cómo es que no pudo vencer a Leon?

Suspiré profundamente

-Él fue satanico, yo lo era hace muchos años pero encontré mi propio camino, creo que eso a él no le hacía mucha gracia, puies para él no existía otra verdad que la suya... Sí tu padre era poderoso de eso no hay duda, pero ocurre algo, Asian lo era más, y hoy lo es mucho más, asi que supongo que no tubo oportunidad, en aquel tiempo León era un nigromante muy poderoso, un vampiro extraordinario; y a pesar de sus conocimientos y de su poder como Papa del Mal, Leo, seguía siendo un mortal, creo que nunca le atrajo la eterna vida.-

Tome un poco mas de chai concentrando mi vista en mis manos

*Seguía mirándola fijamente intentando asimilar sus palabras*

-Y... hay alguna manera de acabar con ese... ser?-dije un poco a la desesperada, algo se podría hacer, yo tenía todo un ejercito de aurores, ella tenía el ejercito imperial, entre los dos podríamos vencerle, pero aún así no estaba seguro del todo

Negue con la cabeza

-Somos mortales, a pesar de todo, puede acabar mas facil con nosotros aun seamos cientos, sonará resignado de mi parte peor lo más adecuado en este momento es vivir njustras vidas y proteger a quienes queremos-

Bajé la voz aun más

-Lo siento sin Gaia nada se puede hacer-

*La miré sorprendido, Gaia? Esa era una diosa de la mitología pagana, que tenía que ver en todo esto?*

-Como que... Gaia? Quieres decir... Gaia existe?

-Gaia existe, la conocemos con muchos nombre, en especial nustro legado celtico nos hace conocerla con ese nombre, algunos solo hablan de un dios supremo pero es la misma divinidad, solo que el mal ganó la batalla, ella aun exiaste, incorporea, parece que no le quedaron fuerzas para materializarce pero exiaste y está entre nosotros-

Suspiré y perdí la vista pro la ventana, a veces preferia dejar algunas cosas apra otras ocaciones

-Tiene que haber alguna manera de ayudarla...-murmuré, yo siempre había seguido la mitología pagana, sobre todo la céltica, y sólo creía en ella, ahora sabía que existía y que había sido derrotada en una batalla. En mis ojos se divisaba unas ganas geniales de ayudar, pero sabiendo que nada podía hacer.

-Espera un tiepo Andrew, las cosas se estan calmando, y como estan las cosas es menos factible tenerr un trato directo con ella, es muy imporbable-

Ladeé mi cabeza mirando a mi hermano

-Ella sigue y logrará volver en eso tengo puesta mi esperanza.-

-Eso espero... Tal vez necesite un cuerpo para manifestarse... Alguien que fuese capaz de sacrificarse por ella... Para que ella pueda librarnos de Asian...-hacía cábalas en mi cabeza, aunque todo parecía demasiado subrrealista

-Quizás.... sí quizás tengas razón, habra una manera de llamarla, oraciones, ... rituales- Me encojí en hombros...-Marcia sabrá de eso- Los ojos se me iluminaron, si mi tutoro, sólo tenia que encontrarla, ella sabría

*Sonreí con esa esperanza, pero un momento después volví a mirarla con seriedad*

-No pensarás en hacerlo tú, no?

-No yo no soy capas. solamente una persona pura podria hacerlo y yo he cometido muchas faltas, y no podria dejar lo que amo aunque sea por una mayor causa... soy muy egoista para ello, tengo mi propia familia y nunca renunciaría a ellos...- Suspiré..

-Mira, sabes que todos tenemos un destino marcado desde que arribamos a este mundo, las cosas se dan siempre por alguna razón....a mi de pequeñá siempre me cutodiaron dos seres, mi querido arcángel, y una Druida, o como aqui le llaman Hechicera Extraordinaria, Gaia les encomendó esa tare... Marcia, está del lado de ella, es un ser puro que solo se ha dedicado a la catividad para que nació.- Recordaba viejod tiempos y enseñanzas que solo tal dama podria dar

-Pero... moriría en el intento, no? Su cuerpo quedaría a merced de Gaia, ella ya no existiría...-dije mirándola-crees que lo hará?

-Sin duda lo haría- Exclamé sin temor a qeuibocarme

-No conosco a ser humano más decidido que Marcia Overstrand, ella tambien cuido de Sophia, se que cuida de ella, la invocaré esta noche-

-Bueno, entonces... Está bien...-sonreí de nuevo esperanzado-espero que me digas como va todo...

-Yo te haré saber... por el momento no hay mucho que yo sepa, solo tratamos de estabilizar las cosas, el mundo está tan horrible... hable con la misnitra de magia y el primer ministr pero no se ha llegado a mucho-


Comenté con pesar mirando como Margaret veia hacia nosotros con una sonrisa

-Bueno, si necesitais la ayuda de mi ejercito ya sabes, estamos para servir a la emperatriz...-hice una media reverencia como en broma, sonriendo